El Ing. Agr. Julián Oliva presentó un ensayo realizado hace pocos días en la provincia de Córdoba en el que se planteó la hipótesis de cuánto pueden aportar los adyuvantes en el secado químico de cultivos de servicio.

Luego de repasar otras experiencias en años recientes, el Ing. Agr. Julián Oliva, miembro de AX Consulting y de la Cátedrá de Protección Vegetal (Universidad Católica de Córdoba) expuso en la Jornada Adyuvantes para Herbicidas 2021 sobre una experiencia de secado de vicia villosa.

El trabajo se llevó a cabo en agosto, en el campo de la familia Latanzi en la localidad de Monte Ralo, provincia de Córdoba.

Recordó, en primer lugar, que el 60% de los productores en el país utiliza vicia villosa, una alta adopción como cultivo de servicio; luego sigue el centeno, avena blanca, entre otras especies.

“En la secuencia de estos cultivos de cobertura, la implantación es una etapa importante, pero es muy importante la finalización, luego de que pasó la estación invernal, dado que tiene que ser efectiva”, subrayó.

Oliva observó que la terminación mecánica (como opción al secado químico) tiene alguna desventaja, debido a que, “para ser efectiva, tiene que ser algo más tardía en el ciclo de vicia villosa y eso puede generar un consumo mayor de agua y comprometer el éxito del cultivo de renta”.

Ventaja del secado químico

El secado químico entonces presenta la ventaja de poder adelantar el ciclo, permitir una etapa de recarga más alta y de allí la importancia de “ajustar el desecado”.

Tanto centeno como el resto de las gramíneas, como avena o triticale, son de fácil terminado usando solo el herbicida glifosato. Pero, en el caso de vicia villosa, es una especie que presenta tolerancia a glifosato, según diferentes experiencias y antecedentes.

Oliva presentó un trabajo realizado en EE.UU., en el que se evaluó el secado de distintos cultivos de cobertura, entre los que vicia villosa se presentó como el más difícil de terminar de manera química. En este caso el herbicida paraquat se expresó “bastante errático”, lo mismo que glifosato, y en el caso particular de glufosinato, mostró “una eficacia alta, pero algo variable cuando se lo utiliza solo, y mejora cuando se le adicionan hormonales, en este caso 2,4D”.

Glufosinato+adyuvantes, alta eficacia

Luego se refirió a otra experiencia en 2017, en Monte Cristo (Córdoba) en la que se evaluó Carfentrazone con glifosato, Saflufenacil con glifosato, paraquat, “hasta ahí ninguno de alta eficacia”. Diquat tampoco (se llegó al 60%). “Y, para nuestra sorpresa, glufosinato aparecía con una alta eficacia para terminación del cultivo de vicia”, recoró Oliva.

En esta experimentación, se había hecho la aplicación en un 30% de floración, algo pasado para el momento deseado. En todos esos tratamientos  habían sido contemplados los adyuvantes, con una silicona y un aceite metilado; en el caso particular de glufosinato se sumó sulfato de amonio.

Qué pueden agregar los coadyuvantes

Con estos dos antecedentes se llegó a la experiencia en el campo de la familia Latanzi, en Monte Ralo, con la idea de confirmar “si los adyuvantes pueden o no agregar en el secado químico de cultivo de cobertura”.

Allí, el cultivo de vicia tratado estaba en una condición muy buena para la época de aplicación, que se llevó a cabo el pasado 20 de agosto. El lote no había tenido cultivo de verano, la vicia se sembró temprano y se contó con una alta acumulación de materia seca al momento de hacer la aplicación.

“Se hizo con el 20% de floración, que es el momento deseado para una máxima acumulación de materia seca y nitrógeno”, precisó Oliva. Con 19° de temperatura, 50% de humedad relativa y parcialmente nublado (condición de falta de luminosidad que podría afectar la eficacia del glufosinato).

Se contempló un tratamiento de solo glifosato a los 5, 10 y 15 dias, este último el tiempo que un productor espera para el secado (más tiempo ya directamente va a ir a un doble golpe).

Al tratamiento de glifosato se le agregó dicamba, y se probó reducirles un 20% y un 40% las dosis, agregándoles un adyuvante silicona más un metilado.

“Claramente, en el caso de dicamba sobre vicia, el adyuvante no estuvo adicionando eficacia al tratamiento, lo que podría ser explicado por un tema de especificidad (herbicida/especie)”, apuntó Oliva.

En el caso de glufosinato (mencionado como un activo interesante en la experiencia anterior publicada), se emplearon 590 gramos de ingrediente activo, equivalente a 2,100 l/ha al 28%, adecuado para generar un secado químico. “En una condición de poca luminosidad, y a pesar de haber bajado un 20% la dosis, el adyuvante estaba agregando eficacia, posiblemente por una mejora de mojado o por una mejora en la penetración del herbicida”, observó Oliva.

Si bien no estuvo contemplado evaluar el agregado o no de sulfato de amonio al glufosinato, “vale la pena aclarar que tiene que estar presente como adyuvante para mejorar la eficacia en particular del glifusinato”, estableció el asesor.

En esta experiencia de campo con vicia villosa, los adyuvantes no habían agregado eficacia para el caso de diquat. En el caso de glifosato con dicamba, al menos hasta los 15 dias no se observaban diferencias y sí estuvo claro que el tratamiento completo con el uso de adyuvantes y el agregado de 2,4D había sido finalmente la mejor opción.

Conclusiones para anotar

–El uso de adyuvantes evaluados como silicona y metilado contribuyó a la mejora del secado químico de vicia villosa.

–La mejora en la eficacia de los tratamientos puede contribuir a moderar las dosis en el secado de vicia villosa; eso tiene que ver con el impacto ambiental de los tratamientos que hacemos.

–La adición de 2,4D y adyuvantes como sulfato de amonio y silicona+MSO (metilado) se presenta como una alternativa sumamente interesante para evitar situaciones de doble golpe en el secado de vicia villosa.